Bomba Hidráulica
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La bomba hidráulica de un coche es un componente esencial en varios sistemas del vehículo que dependen de la presión de un fluido para funcionar. Erróneamente, se asocia con la dirección asistida, cuando su papel se extiende a otros sistemas vitales, como por ejemplo el sistema de frenos, la suspensión activa o sirve de apoyo a sistemas de transmisión. En otras palabras, es la encargada de generar y mantener la presión necesaria del líquido hidráulico. Sin una bomba hidráulica en buen estado, la dirección será pesada y otras funciones dejarán de operar correctamente.
Preguntas frecuentes
La de generar y mantener la presión del fluido hidráulico (aceite o líquido de dirección asistida) que se necesita para operar varios sistemas. En los coches modernos, su uso más moderno es para la dirección asistida, ayudando a girar las ruedas con facilidad. En los modelos antiguos, sirve para asistir a los frenos, como el servofreno hidráulico, o forma parte del sistema de suspensión activa o embragues hidráulicos.
Durante la conducción comenzarás a notar ciertos síntomas, como:
- Dificultad para girar el volante, sobre todo a bajas velocidad o en parado.
- Cuando gires el volante notarás como un zumbido, gemido o chirrido.
- Habrá manchas bajo el coche, o niveles bajos en el depósito, por fugas de líquido de dirección asistida.
- El volante no regresa solo a la posición central tras un giro.
- Notarás que el volante vibra.
Las causas más comunes se deben a:
- Un bajo nivel, o nivel incorrecto, de líquido hidráulico.
- Que el líquido hidráulico sea viejo o esté sucio.
- Que haya aire en el sistema.
- El componente puede estar desgastados.
- Una correa de transmisión defectuosa o mal ajustada.
Técnicamente es posible hacerlo, pero no es lo más recomendable ni seguro. Piensa que la dirección del vehículo se volverá extremadamente dura, lo que requerirá de un esfuerzo físico considerable, y también supondrá mayor dificultad a la hora de controlar el vehículo, sobre todo en maniobras o situaciones de emergencia. En pocas palabras, aumentará el riesgo de sufrir un accidente.
La bomba hidráulica como tal no necesita mantenimiento, sino que más bien debes fijarte en el líquido hidráulico:
- Verificar el nivel regularmente para asegurarte que es el correcto y rellenarlo cuando sea necesario.
- Reemplazar el líquido cada 80.000-100.000 kilómetros o cada dos años para eliminar impurezas y líquidos degradados.
- Revisar las mangueras y conexiones para detectar fugas.
Si, existen dos tipos:
- Las bombas hidráulicas tradicionales, que son accionadas por correa y las más comunes en vehículos antiguos.
- Las bombas electrohidráulicas, conocidas como EHPS, que utilizan un motor eléctrico para impulsar la bomba hidráulica, permitiendo que la asistencia funcione incluso con el motor de combustión apagado.
Los vehículos que son 100% eléctricos, así como muchos híbridos, utilizan un tipo que se conoce como dirección asistida eléctrica (EPS) que no tienen bomba hidráulica, sino un motor eléctrico que cumple la función.
El coste puede ser muy diferente según el modelo y marca del vehículo, el tipo de bomba o el precio que te cobre el taller por la mano de obra. Se considera una reparación de coste medio-alto.
No, pues es una tarea que requiere de conocimientos de mecánica y herramientas específicas. Implica vaciar y rellenar el sistema hidráulico, purgar el aire y asegurar que todas las conexiones estén conectadas correctamente. Si no tienes experiencia ni formación, así como tampoco un pequeño taller en el que hacer tu el cambio, lo mejor es dejarlo en manos de un profesional.
Adquirir una bomba hidráulica usada para tu coche es una opción que puedes barajar. De hecho, en nuestro desguace encontrarás de ambos tipos, para varios modelos y marcas reconocidas del mercado. Además, te garantizamos el perfecto estado de la pieza, ya que la hemos testeado y verificado que está en perfectas condiciones para volver a usarse. Con lo que te ahorres, ¡podrás cubrir los gastos del taller!